Es el día a día...continuamente

Adaptación de Esther Vazquez sobre piezas breves de J. Luis Alonso de Santos y textos de Carmela Barreto y Esther Vazquez.
 

El proceso está en marcha desde tiempos inmemorables. ¿Cómo comenzó todo?, ¿cuándo?, ¿por qué? Sólo somos una parte del hombre, sin él nada.
A través de la diferencia en el lenguaje, entramos en este proceso de la mano de 2 mujeres de la “profesión” más antigua del mundo, la prostitución, una maquinaria sexual machista que siempre existió y continúa, convirtiendo a la mujer como simple objeto para el placer del hombre.
Dentro de un marco satírico, llega el hombre, victimario y víctima a la vez de sí mismo y de la educación machista en la que se crió y vive, quien nos deja entrever la miseria y el vacío existencial que padece.
La niña, con sus vivencias, se encuentra con la mujer, con todo el bagaje adquirido. Así lo cotidiano es el infierno, y el infierno se convierte en cotidiano, sucumbiendo a su destino.
Pero no todo está perdido, la posibilidad de rebobinar el proceso nos deja un canto a la esperanza.

Reparto
Maruchi: Carmela Barreto

Trini: Francesca Totta
Chulo: Abraham González

Borracha: Esther Vazquez

Madre: Aurora Curbelo
Niña: Ada Valente
Mujer: Carmen Guerrero
Hombre: Gonzalo del Campo
Mujer final: Carmela Barreto
Chicos de Carteles: David Camacho y Diego Castiñeiras
Chico: David Camacho

Borracho: Gonzalo del Campo
Encarni: Carmen Guerrero


Diseño gráfico: Juanjo Melero
Vestuario: María Rodríguez
Maquillaje y Peluquería: Isidra Bolaños
Iluminación y sonido: Christophe Berthet
Escenografía: Andrés Varela
Arreglos musicales: Salomé Gonzalez
Dirección: Esther Vazquez



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